INTIMIDAD CON DIOS

1) INTIMIDAD CON DIOS - JEREMIAS 33-3
¿de que manera me muestra Dios el deseo de tener intimidad conmigo?
Jeremías 29-11 al 14b dice: que nosotros vendremos a suplicar y El nos escuchará, le buscaremos y El dice que lo encontraremos cuando sea de todo corazón, me dejaré encontrar dice el Señor.
Romanos 8-14 al 17 dice que somos hijos de Dios por adopción, por consiguiente somos herederos del Padre y coherederos con Cristo y tendremos parte en su gloria.
Apocalipsis 3-14 al 22 dice: que El Padre nos conoce, conoce nuestra condición y nos aconseja ser más fervorosos y nos dice que El está a la puerta, espera que abramos nuestro corazón a la intimidad con El, para que entre a morar con nosotros y nos dá la promesa: al vencedor le daré el derecho a sentarse conmigo en el trono, porque El fue el vencedor de la muerte y el pecado y Dios le dio ese derecho y esa es la herencia de la que hablábamos antes. Dios nos reconcilió con El por medio de la obra de Cristo en la cruz, por medio de esa obra nosotras podemos responder a la invitación de Dios a tener intimidad con El.
Y ¿qué seguridad de acceso a nuestro Padre Celestial tenemos? Hebreos 4-14al 16 dice:
Que tenemos un gran sumo sacerdote que nos comprende y es capaz de compadecerse de nuestras debilidades, porque El lo padeció todo, y nos dice esas palabras tan hermosas: Acerquémonos confiadamente al trono de la gracia para recibir misericordia y hallar la gracia que nos ayude en el momento de necesidad.

2) ORANDO EN FE SANTIAGO 1-6 Y 7
Por ejemplo, si yo le pido a una hermana que me cuide la casa porque me voy a ausentar por unos días, pero por las dudas le voy a decir a mi hijo que esté con ella, por las dudas que ella me maltrate a las plantas o se olvide de regarlas. No tengo fe o confianza que esta hermana va a hacer bien su trabajo. Lo mismo pasa cuando vamos a Dios con dudas. No necesitamos esforzarnos o forzarnos a creer o sacar las dudas de nuestros corazones, es inútil. Debemos ir al Señor con todo, entregarle nuestras dudas a El, no importa lo difícil que sea, no debemos asustarnos por las dudas o nuestra débil fe, sino decirle al Señor cuán débil es nuestra fe y que tenemos dudas de que El nos conteste las oraciones. El nos fortalecerá, porque El necesita nuestra fe para contestar las oraciones.
Efesios 3-12 tenemos libertad y acceso a Dios por medio de la fe. En Juan 14-8 al 15 el Señor enseñó la importancia de la fe y su relación con la oración. En Marcos 11-20 al 26
David expresa su fe en Dios Salmo 18-1 al 3 El Señor es mi roca....

3) DELEITE EN DIOS SALMO 67-4
“Deléitate en el Señor y El te concederá las peticiones de tu corazón”
¡Que promesa tan formidable! ¿qué significa este versículo? Si yo realmente amo a Dios, El me dará lo que le pido! ¿si es así porque no funciona? Cuando vamos madurando en la vida cristiana y ejercitando la oración como parte vital de nuestra vida, vamos comprendiendo que significa “deleitarnos en el Señor”
DELEITARSE:– placer del alma –sentir algo agradable - sentir gozo – complacencia – placer del alma - sentir gran placer (a veces sentimos placer al leer un libro, al mirar un paisaje, etc)
Salmos 1- 1 al 3: dichoso el hombre que se deleita en Jehová – Salmo 40-8 Me agrada hacer tu voluntad – Salmo 111-2 las grandes obras de Dios nos causan deleite – Jeremías 15-16 la palabra de Dios nos causa gozo y alegría.
Podemos estar seguras que a medida que nos deleitamos en lo que Dios se deleita, nuestras oraciones están inspiradas por Dios y tendrán contestación.
El pueblo de Israel en el desierto oraron por carne. Dios mostró su descontento Salmo 78-18 pusieron a Dios a prueba exigiéndoles comida. Pidieron algo en lo que Dios no se deleitaba Salmo 106-15 Dios les contestó a lo que pidieron, pero les envió una enfermedad mortal sobre ellos. Cuando mi corazón está dispuesto a andar sin mancha delante del Señor, entonces mi deleite será hacer solo su voluntad
Lucas 22-42 el más vivo ejemplo lo tenemos en el Señor “ no se haga mi voluntad, sino la tuya”
Y vemos la síntesis en la oración de Asaf : Salmo 73-25 y 26 “¿a quien tengo en el cielo sino a Ti?
4) LAS RESPUESTAS DE DIOS SALMOS 34-4
A veces nos desanimamos cuando vemos como pasa el tiempo y las oraciones no son contestadas. También tenemos el concepto equivocado de pensar que responder es conceder a veces nos encontramos que no es un consentimiento sino una negación. Pero en Isaías 65-24 dice: “Antes que clamen yo responderé”
David testifica que mientras oraba el Señor le contestaba. La respuesta inmediata de Dios a David que en ese momento estaba en apuros fue: Librarlo de todos sus temores , no de sus problemas. Siempre deseamos y esperamos una respuesta afirmativa, pero Dios incluye los NO, ESPERA, CONFIA. Es vital que nuestras oraciones no sean de demandas, sino hechas con fe, y en el Espíritu de deleitarnos en su Palabra y desear su voluntad y reconocer la importancia de dejar las respuestas en manos de un Dios amante que sabe que cosas nos convienen.
1º Crónicas 17-1 y 2 David quiere hacer casa a Jehová, el profeta Natán le dice que lo haga,pero no lo consultó con Dios. Cuando los jóvenes comienzan a crecer comienzan a hacer planes, tienen sueños, algunos piensan en salir de noche o quedarse en casa de algun compañero como aventura, se acercan a su padre y le piden permiso para ir a tal lado, el padre le dice: de ninguna manera, pero ¿por qué si es un lugar bueno? Porque tu padre sabe lo que es bueno para vos.
David tambien tenía el sueño de edificar casa a su Dios, tal vez pasaba las noches planificando como hacerlo. 1º Crónicas 17-3 y 4 en aquella noche vino palabra de Dios a Natán diciendo: dile a David mi siervo: tu no edificaras casa en que habite. ¡que desilusión! Muchas veces planeamos y Dios como Padre dice NO. Natán se equivocó al principio, así como muchos pueden equivocarse al dar un consejo, por eso siempre hay que ir a Dios en oración y pedirle que nos muestre su voluntad. A nosotros nadie nos obligó a ser sus hijos, fue elección propia y Dios nos tomó en serio como todo lo que es de El y desde ese momento es nuestro Padre y a veces dice NO. Si le dijo No a David ¿por qué no me lo va a decir a mi? Ahora ¿por qué tengo que obedecer?
1) recuerda de donde te sacó Versículo 7 Así ha dicho Jehová: yo te tomé del redil, de detrás de las ovejas, para que fueses príncipe sobre mi pueblo Israel”
de todos los hijos de Isaí, era el último, el menos considerado. Recordemos de donde nos sacó Dios y ¡Obedezcamos!
2) debemos obedecer porque El tiene todo bajo control Versículo 8 “y he estado en todo cuanto
has andado, y he cortado a tus enemigos, delante de ti y te haré gran nombre, como el
nombre de los grandes sobre la tierra” no desesperemos cuando El dice No, no nos
desanimemos, Dios siempre tiene planes para cada uno de sus hijos y su descendencia.
Versículos 10b al 13 “te hago saber además que Jehová te edificará casa, y cuando tus días sean cumplidos para irte con tus padres, levantaré descendencia, a uno de tus hijos, y afirmaré su reino, el me edificará casa, yo le confirmaré trono eternamente. Yo le seré por Padre y él me será por hijo............
David tuvo un sueño roto. Cuántas veces Dios nos dijo que NO. ¿por qué a mi? ¿por qué? Reclamamos y reclamamos! No aceptamos que nuestros pensamientos son demasiado limitados ante los pensamientos de nuestro Creador. David tuvo un sueño roto, y ¿qué hizo?
Versículos 16 al 20. “ y entro el rey David......” ¿podemos hacer lo mismo? ¿aceptamos la soberanía de Dios en nuestra vida? Estamos dispuestas a decir: “Señor reconozco que tienes todo bajo control, yo aun veo confusamente, pero se que quieres lo mejor para mi, estoy dispuesta y romperé todos esos sueños que no están acordes a tu voluntad y buscaré solo tu dirección.
Podemos imaginar a David entrando a la presencia del Señor, doblando sus rodillas y aceptando la voluntad de su Padre
Dios siempre contesta la oración en su forma y en su tiempo, para nuestro bien y para su gloria. Muchas veces oramos y no vemos la contestación (a veces por años) y nos damos cuenta que nos convertimos en oradoras perseverantes y confiadas y llegamos a tener una intimidad más profunda con el Señor. Tal vez mi petición no fue concedida pero mi oración fue contestada.
Veamos la oración que hace David, por confianza en la respuesta de Dios. Salmos 69-13
“Pero yo Señor te imploro en el tiempo de tu buena voluntad, por tu gran amor, oh Dios respóndeme; por tu fidelidad sálvame”
Aceptemos la invitación de Dios a tener una íntima comunión con El por medio de la oración, hagámoslo con fe, sabiendo con quien estamos hablando, encontremos deleite en su Palabra y en el Señor y confiemos que siempre nos contesta. Amén
MARGA